viernes, 16 de febrero de 2024

1600 Alcaides de Nogales

 


ZACHANDO RAÍCES

Solemos buscar nobleza en nuestros apellidos, esperando acaso alguna buena herencia. Y digo buena, porque para mala ya tenemos las enfermedades genéticas y otras desgracias mayores.

Hace ya unos años encontré algunos de mis apellidos en los archivos parroquiales más antiguos de Nogales. En el libro de bautismos de la primera mitad del siglo XVII. Se trataba de la familia Ramírez de Arellano - Bazán, alcaides del castillo de Nogales, según consta en las dos partidas que después analizaremos.

A raíz de lo cual me interesé por la figura del “Alcaide”, y por quienes de Nogales lo fueron.
El alcaide era el jefe máximo de una fortaleza o castillo. Y aunque principalmente tenía funciones militares, debiendo de tener todo preparado para la defensa del sitio ante cualquier ataque exterior, desempeñaban también otras tareas en representación del Duque, como impartir justicia, administrar su patrimonio (mayordomo), firmar contratos en su nombre, llegar a acuerdos con el concejo, etc.
Los alcaides los nombraba el Duque entre integrantes de familias nobles de su confianza En muchas ocasiones, y sobre todo en épocas más recientes, siglos XVII y XVIII, los elegían entre simples hidalgos.

Pensemos que el castillo de Nogales, por su proximidad ante la frontera portuguesa, era la punta de lanza del estado de Feria. Tenía que estar bien defendido.
La primera referencia que hemos encontrado sobre alcaides en Nogales, data de 1599. Del archivo del ducado de Medinaceli.
(ADM Feria leg. 44, ramo 40, n. 1)
“Obligación y fianza que Jorje Mejía dio al duque como alcaide y mayordomo de Nogales”.
No tenemos acceso al documento, pero ya sabemos que el nombrado alcaide tenía que garantizar al Duque que iba a ejercer su cargo con la debida diligencia. Para ello, él o sus fiadores, tenían que señalar algunos bienes que perdería en caso de no cumplir con sus obligaciónes o llevar una mala gestión.

                   Encontramos también a Jorge Mejía, en unas escrituras de Reconocimiento de 1.598, como Alcaide y Mayordomo de Nogales, En ellas, el Bachiller Hernando Gil de Isla, vecino de Almendral, pide que se le reconozca como propietario del molino, pues “Isabel González de Almendral, hija y heredera de Juan Gómez, difunto, le vendió el molino al sitio de la Puente, que se dice del Duque, con carga de 12 ducados” (4.500 mrs). Como testigos, aparte del alcaide, están Gaspar González, Juan Pavón y Francisco Pérez, de Nogales los tres.

Posiblemente fuera tras Jorge Mejía, cuando es nombrado alcaide Don Juan Ramírez de Arellano, casado con doña Inés de Bazán, según consta en dos partidas bautismales. Una de 1625 y otra de 1629. A los dos niños les ponen el mismo nombre, Diego. Lo que quiere decir que el primero murió pronto.

              En la primera partida, de 1625, son padrinos el abuelo, D. Fernando Bazán, y la hermana del bautizado, Isabel. Los Bazán eran descendientes de Don Álvaro de Bazán y Guzmán, I marqués de Santa Cruz. Militar y almirante español del siglo XVI


      En la 2ª partida, de 1629, el padrino es Don Pedro Ramírez, signatario (apoderado) del Duque de Feria. Los Ramírez de Arellano procedía de una familia noble navarra. Muchos de sus miembros, de varias generaciones, desempeñaron cargos en la administración del patrimonio la familia ducal, repartiéndose por toda la zona, Zafra, Fería, Alconera, Salvatierra, etc. Los de Nogales, al igual que los Bernáldez, vienen de los que se establecieron en Salvatierra a mediados del XVII.

En esta partida de 1629, aparece Juan Ramírez como padrino en un bautizo de una hija de Isabel, esclava de don francisco del Río.

También nos aparece Don Juan Ramírez en una referencia del Archivo Ducal en 1627, como mayordomo del pan. Osea, administrador del trigo que recibía el duque en sus “novenos”
(ADM Feria leg. 45, ramo 20, n. 1)
“Fianza otorgada por Juan Ramirez de Arellano a favor del duque como mayordomo del pan del partido de Nogales.”
Pero ¿cuál era la situación del Ducado y del país?
Por entonces reinaba el nieto de Felipe II, Felipe IV, rey de España y de Portugal, además de Nápoles, Sicilia, Cerdeña y duque de Milán. Precisamente en Milán se encontraba el III Duque de Feria, Don Gómez, designado por el Rey su gobernador.

En 1612 había muerto su abuela Jane Dormer, que tanto había hecho por Zafra y el ducado. En 1623 muere su primera esposa sin descendencia, y en el 24 su último gobernador, el canónigo Tomás Ollés. En esta situación, y no pudiendo dejar su puesto en Milán, se ve obligado a escribir, a finales de 1624, a su pariente el conde de los Arcos, Don Pedro Lasso de la Vega Niño y Guzmán, pidiéndole que se hiciera cargo del gobierno de su estado de Feria. (De Juan Manuel Valencia Rodriguez, en "El III Duque de Feria, gobernador de Milán 1618-1626 y 1631-1633")
Castillo de los Arcos entre Almendral y Valverde
De la familia de los Figueroa Laso de la Vega
En mayo de 1625, buscando asegurarse descendencia, casa en Montilla con su sobrina Ana Fernández de Córdoba.
Otra referencia, nos la ha proporcionado Ángel Vaca Arévalo. Quien buscando los Vaca de Nogales, nos ha comentado que encontró en el libro 1 de defunciones, años 1.649-1728, una partida del 28/08/1660 en la que dice haber dado sepultura al cuerpo de Antonio Bravo, Gobernador del castillo.

En el último cuarto del XVII, 1675, pudiera haber desempeñado el cargo Don Juan de Alvarado, casado con doña Catalina Ceballos. En esta partida aparece como padrino un teniente general de artillería.


Avanzando en el tiempo, llegamos a 1752, en el interrogatorio que se hace a los pueblos para elaborar el catastro, en este caso el llamado del Marqués de la Ensenada, al final de la respuesta a la 2ª pregunta, dice: "... y del mismo modo le pertenece nombrar como nombra Alcalde del Castillo y fortaleza que lo es de presente Don Francisco Marrochin vezino de la villa de Salvaleón por lo que no percive cosa
alguna".

Pero ¿Dónde vivía esta gente en el pueblo? Siempre hemos oído que el castillo era un edificio destinado a albergar tropas. Pero no una familia, al menos en la torre.
Otra posibilidad era que vivieran en casas dentro de las murallas. Como la casilla. O vivían en alguna casa de la calle del Castillo o de San Juan. En esta última tenemos la casa de los abuelos de Nicolas Aranda en la que se halló el escudo de los condes de Feria, y que ahora lucimos en la fachada del Ayuntamiento. Si alguien tiene alguna idea…
Algo de luz aporta la última reseña que encontramos. En las respuestas que dan los de Nogales al Interrogatorio para la Real Audiencia creada en Cáceres, en 1791: “En este término y extramuros del pueblo hay un castillo que pertenece a el Excelentísimo Señor Duque de Medinaceli y Santistevan, etc., y tiene un zercadito de tres o quatro celemines de tierra en sembradura que lo disfruta su Alcayde”

¿Quiere decir esto que vivía en el Castillo?
Seguramente cualquier día de estos lo averiguaremos.